Los mercados financieros creen que las probabilidades de ruptura se han elevado del 30% al 40%, y por ello los mercados más castigados son los más beneficiados por la recuperación desde aquel anuncio de cambio en la política europea en agosto del 2012. El Ibex 35 cedió este lunes un 4,56%, hasta los 10.853,9 puntos, con unas pérdidas de 29.600 millones de euros, casi la mitad de ellas correspondieron a los bancos. La prima de riesgo quedó en 155 puntos básicos, con aumentos superiores al 40% en un solo día.
La nueva crisis saltó el primer ministro de Grecia, Alexis Tsipras, anunció el sábado un referéndum donde su gobierno defendería el no a los acreedores y el consiguiente impago de la deuda, ante lo que Bruselas respondió en este nuevo capítulo de la tragedia del último sexenio revelando un “plan b” esbozado tras las últimas cinco cumbres de las dos últimas semanas y que se mantenía en secreto, incluso cuando el BCE amenazó con retirar su ayuda a Grecia: admitir la renegociación de la deuda si el Gobierno griego defiende el sí en el referéndum. En la madrugada de este martes, Bruselas hizo una oferta de última hora a Grecia en un intento por alcanzar un acuerdo, tras haber rechazado prolongar el programa de rescate que finaliza hoy miércoles, y ante el anuncio de Atenas de no pagará al Fondo Monetario Internacional el vencimiento de 1.600 millones de euros.
Así Bruselas admitía por primera vez los posibles costes para los contribuyentes (España tiene 26.000 millones de euros en avales y préstamos a Grecia) de la política alemana y europea de imponer la austeridad durante los últimos seis años a Grecia, en vez de admitir el impago o la mora ad calendas graecas, fecha según el diccionario español de la RAE imposible porque los griegos no contaban el tiempo en esas calendas. El presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, pidió ayer a los griegos que voten ´si´ en el referéndum del próximo día 5 para lanzar el mensaje "de que quieren seguir en la eurozona y en la familia de la UE". "Un ´no´, independientemente de la pregunta, significaría que Grecia dice no a Europa y que quiere alejarse del euro" y "será desastroso", advirtió. Un miembro del Consejo Ejecutivo del Banco Central Europeo, Benoti Coeure, aseguró en una entrevista que la salida de Grecia del euro, que hasta ahora era una "supuesto teórico", "ya no se puede descartar". La canciller alemana, Angela Merkel, apeló a los "valores comunes", aseguró que Europa "vive de su capacidad para encontrar compromisos" y alertó contra el cortoplacismo. "Fracasa el euro, fracasa Europa", advirtió.
Aunque Tsipras, descartó este lunes que Grecia vaya a salir del euro porque "el coste es demasiado grande" para los socios de la UE en una entrevista en la televisión griega, Grecia amaneció con fuertes restricciones para sacar dinero de los bancos, que a partir de hoy y al menos hasta el 6 de julio no abrirán sus puertas. Tampoco abrió hoy la Bolsa de Atenas. Tsipras llamó a los griegos a votar ´no´ con todas sus fuerzas para "reforzar la posición del Gobierno en las negociaciones" con la UE y el FMI. Previamnente, en un mensaje televisado culpó a las instituciones europeas de la situación y volvió a reclamar una prórroga del rescate financiero hasta la celebración del referéndum del próximo domingo, aseguró que está garantizado el dinero que los griegos tienen depositado en los bancos, así como el pago de las pensiones y los salarios de los funcionarios. El Consejo de Estabilidad Financiera de Grecia limitó la retirada de efectivo a 60 euros por persona al día. Las colas ante los cajeros automáticos de los bancos griegos volvieron a repetirse en la jornada de ayer, pese a que el BCE decidió seguir asistiendo con fondos de emergencia al sistema bancario heleno. Sin embargo, la institución dirigida por Mario Draghi informó ayer de que podría reconsiderar su decisión. El martes expira el rescate financiero a Grecia, y el BCE puede verse obligado a cortar su línea de crédito si Atenas no paga al FMI la deuda de 1.500 millones de euros que vence mañana.
La oposición griega se une contra el referéndum
Los partidos griegos lanzaron el domingo sus campañas ante el referéndum del próximo domingo, en el que los ciudadanos están llamados a decir si aceptan las condiciones impuestas por las instituciones europeas para prorrogar el rescate financiero. El conservador Nueva Democracia y los socialistas del Pasok unirán sus fuerzas contra el primer ministro, Alexis Tsipras, que ya ha pedido el voto en contra de la propuesta de los acreedores internacionales. "La dignidad del pueblo griego frente al chantaje y a la injusticia mandará un mensaje de esperanza y orgullo a toda Europa", afirmó ayer Tsipras. Por su parte, el líder de la oposición, Andonis Samaras, reclamó la suspensión del referéndum y volvió a defender la formación de un gobierno de unidad nacional. "Nuestro país necesita seguir en el corazón de Europa y en el euro", señaló el ex primer ministro griego.
Desde Bruselas, diversas fuentes aseguran que si Tsipras desconvoca el referéndum o hace campaña a favor del acuerdo propuesto por sus acreedores, las instituciones europeas estarían dispuestas a profundizar en las ofertas de revisar la sostenibilidad de la deuda helena. En un gesto poco habitual, la Comisión Europea difundió ayer el contenido de su última propuesta al Gobierno griego, en la que se contemplan condiciones "extraordinariamente ventajosas", según señaló la propia Merkel antes de que Tsipras dinamitara las negociaciones al anunciar la convocatoria del referéndum. Sin embargo, ahora fuentes del Ejecutivo heleno aseguran que ese documento no lo tuvieron nunca en sus manos.
La canciller alemana, Angela Merkel, informó a los partidos de la oposición y mantuvo una conversación telefónica con el presidente de Estados Unidos, Barak Obama, donde ambos mandatarios coincidieron en la necesidad de hacer todos los esfuerzos posibles para que Grecia permanezca en el euro y vuelva a la senda del crecimiento. La directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, expresó ayer u "decepción" por la falta de acuerdo sobre la crisis griega e insistió en la disposición del organismo que dirige para encontrar una solución. "El FMI está listo para una aproximación entre las autoridades griegas y los socios europeos", apuntó.
Rajoy vincula Grecia y los pactos PSOE_Podemos
El jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, presidió este lunes la Comisión Delegada de Asuntos Económicos para analizar la situación creada en Grecia tras la ruptura de las negociaciones con las instituciones europeas para la prórroga del rescate financiero.
Rajoy informó de la convocatoria de la reunión al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, con quien intercambió puntos de vista sobre la situación griega en una conversación telefónica, pero este lunes Rajoy aludió ante la prensa a Grecia para criticar posibles pactos de PSOE y Podemos. Previamente, fuentes socialistas decían que ambos coincidieron en la necesidad de que Grecia permanezca en el euro para evitar posibles turbulencias financieras.
El ´corralito´ griego en los diarios
Todos los diarios nacionales han abierto desde el sábado con esta crisis y dedicado editoriales a ella. "Europa alerta de que los griegos deberán elegir entre euro y dracma", titula este martes EL PAÍS en portada y considera que Europa "convierte el referéndum de Grecia en un plebiscito sobre el euro". EL MUNDO habla de "ultimátum de Europa a los griegos". Según ABC,"Juncker desenmascara la farsa de Tsipras". LA VANGUARDIA señala que "Europa asume el reto de Tsipras y pide el sí en el referéndum". Para EL PERIÓDICO, "la UE trata de derrotar a Tsipras en las urnas". LA RAZÓN titula: "Rajoy descarta el contagio y la UE señala a Grecia la puerta de salida si vota no". "Miedo sí, pánico no", describe en portada CINCO DÍAS.
Igualmente, el lunes coincidían en definir la situación como un corralito, nombre con el que se denominó popularmente en Argentina a la restricción bancaria de dinero en efectivo. "Grecia se sumerge en el caos financiero y ordena un corralito", titula EL PAÍS, que destaca también el "frente común" de la oposición contra el referéndum convocado por Tsipras. En la misma línea, EL MUNDO señala en primera que "Grecia se somete al corralito". Además de destacar la petición de Obama a Merkel para buscar una solución que permita al país heleno permanecer en el euro, este último diario también destaca en sus titulares que "Rajoy llama a Pedro Sánchez y afronta los riesgos con un gabinete de crisis". ABC, por su parte, dice en su portada que "los populistas de Sryriza imponen el corralito en Grecia", y añade en sus páginas de internacional que "Tsipras justifica el colapso de la economía griega culpando a Europa". Por último, LA RAZÓN habla en su portada del "pánico al corralito de Tsipras" al que hoy se enfrentan los mercados internacionales.
Principales editoriales del martes
Juncker acierta al simplificar: ´sí ´en el referéndum griego es ´sí ´a Europa (EL PAÍS): "Los ciudadanos griegos han empezado a percibir que el alejamiento del consenso europeo puede conllevar unos costes aún peores que los de la -ya reformada- antigua política de austeridad extrema". "Al mismo tiempo, el Gobierno de izquierda radical y derecha ultranacionalista intenta engañar sobre la naturaleza del referéndum que ha convocado. Lo presenta como un mero recurso democrático (…), de carácter inocuo, para que el pueblo griego "decida si acepta o no" las propuestas de los socios europeos". "Pero esa apariencia de equidistancia oculta que el propio Tsipras convoca a votar contra las propuestas europeas porque suponen, dice, ´humillar´ a los griegos. Y ahora tiene la increíble audacia de insistir a los socio/acreedores en que le den una moratoria para votar luego contra ellos". "Por eso, ante la torticera retorsión de un mecanismo democrático, el planteamiento del presidente de la Comisión, Jean-Claude Juncker, a primera vista simplificador, acierta de lleno": Votar no significa que Grecia dice no a Europa". "Es un planteamiento de riesgo, pero ya era hora de que las instituciones europeas hablasen un lenguaje político claro, más allá de tecnicismos". "Naturalmente que el envite no afecta sólo a Grecia". El corralito generó ayer turbulencias en los mercados financieros de toda la UE. "Esta crisis afectará también a las actitudes y a los conceptos. Muchos descubrirán que es mejor la soberanía monetaria compartida de facto que una pretendida soberanía nacionalpretendidamente ilimitada", pero que al primer revés cede paso al imperio de los mercados".
No habrá más negociación, todo queda en manos de los griegos(EL MUNDO): "No habrá nuevas negociaciones antes de la consulta del domingo". "Los griegos tendrán que decidir en las urnas si aceptan o no el documento que rechazaron el pasado sábado". Así lo reflejaron ayer la canciller alemana, Angela Merkel y el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker. "La salida de Grecia de la moneda única implicaría una suspensión de pagos del país, la salida masiva de capitales y una devaluación competitiva, que provocaría un drástico aumento de la inflación". "Si triunfa el no, Tsipras no tendrá otro remedio que sacar a Grecia del euro si quiere ser coherente con sus planteamientos. Si gana el sí, no le quedaría al líder de Syriza otra alternativa que dimitir y convocar probablemente otras elecciones. Ninguno de los dos escenarios es bueno para Grecia, aunque la victoria del no sería mucho peor porque supondría la ruptura con la UE". "Debido a la irresponsabilidad de Tsipras, los griegos tienen que tomar el domingo una decisión que afectará no sólo a su país sino al futuro de la Unión Europea. Lo deseable es que Grecia continúe dentro del euro, pero lo que no es posible aceptar es que esa permanencia se produzca mediante privilegios que generen nuevos agravios comparativos de otros socios".
Encrucijada histórica para Grecia(ABC): Tsipras, "no ha calculado con prudencia las consecuencias del referéndum que ha convocado para el próximo domingo"; Juncker, "si lo ha hecho". "Tsipras lanzó el órdago de una consulta para cubrirse las espaldas ante su incapacidad para representar dignamente los intereses de su país en una negociación vital para Grecia. Juncker le ha aceptado el órdago y se lo devuelve emplazando a los griegos a decidir entre seguir en Europa o salir de Europa. Esta es la encrucijada griega. Todos los implicados en las negociaciones con Grecia son conscientes de que la salida de este país de la zona euro provocará muchos problemas a los socios europeos. Pero también saben que la continuidad de Grecia en los términos actuales -sin reformas, sin nuevos sacrificios- es una opción aún peor". "Políticamente, el caso griego trasciende el debate sobre cuál es la política económica adecuada para un país en crisis y entra de lleno en las consecuencias de que lleguen al poder partidos populistas de extrema izquierda".
Valoraciones del lunes y anteriores
La única salida de Grecia es votar ´sí´ en el referéndum (EL PAÍS): Antes incluso de celebrarse la reunión del Eurogrupo de ayer, el primer ministro griego, Alexis Tsipras, abortó de facto las negociaciones al convocar a su conciudadanos a un referéndum contra el presunto intento de sus socios de "humillar al pueblo griego". La salida del referéndum es intempestiva y es, además, un falsa salida, ya que el Gobierno griego pretende que los ciudadanos asuman una perjudicial secuencia de corralito-suspensión de pagos-riesgo de exclusión del euro, cuando se manifiestan en las encuestas favorables a seguir en la moneda única. Si el primer ministro griego parecía haber iniciado el camino hacia un cierto pragmatismo, lo colma ahora de insensateces. No obstante, el Eurogrupo debe dejar expedita la eventualidad de un retorno al pacto y proteger especialmente del contagio a sus socios más débiles.
Grecia rompe la baraja (LA RAZÓN): Alexis Tsipras decidió ayer cruzar su particular Rubicón para dejar a los griegos al borde de un precipicio de incalculables consecuencias de las que tampoco se librará Europa. Tsipras, con su convocatoria de referéndum, rompió la baraja en plena negociación de las partes. Estaba casi cantada la respuesta a un planteamiento insólito y rupturista del responsable de un país y una economía abocados a la suspensión de pagos. La bravuconería de Tsipras esconde en realidad una enorme falta de coraje político para asumir la responsabilidad del gobernante y adoptar decisiones impopulares. Nos asomamos a un escenario desconocido, de consecuencias imprevistas para todos, en un contexto económico dubitativo en algunas de las naciones punteras de la Unión. Pero las instituciones comunitarias disponen de instrumentos y capacidad para afrontar la ruptura y minimizar el contagio.
El referéndum convocado por Tsipras es un error (ABC): La zona euro navega por aguas desconocidas y muy peligrosas Tsipras ha anunciado un referéndum sobre el plan de rescate de Grecia que sólo puede calificarse de error. El Grexit para el que ayer el Eurogrupo se preparaba sería, de consumarse, una fracaso sin paliativos no ya de la construcción europea, sino de su misma economía y de su capacidad para gestionarla. No se entiende cómo un Gobierno que fue elegido en enero para renegociar el plan de rescate en solo seis meses devuelva la decisión sobre esa negociación a los ciudadanos que lo eligieron con ese mandato. Bruselas habla de irresponsabilidad y Atenas impulsa un falso debate de democracia contra neoliberalismo. No lo es, de la misma forma que no es de recibo todo lo que los griegos han sufrido desde 2009 ni algunas de las exigencias de los acreedores. Entre todos han hecho que el Grexit se haya convertido en una amenaza muy real no solo para Grecia, sino para el euro.
Tsipras, un irresponsable que aboca a Grecia a salir del euro (EL MUNDO): La mera convocatoria del referéndum en Grecia es ya un bofetón a Europa, salga lo que salga, porque es una decisión del Gobierno griego que ha roto las negociaciones unilateralmente. Pero, sobre todo, aboca a Grecia a salir del euro si el resultado es el rechazo del plan europeo. Si no hay un cambio de actitud, Grecia tendrá serias dificultades para evitar el colapso de su sistema bancario. La actitud de Tsipras puede causar un daño irreparable a Grecia al empeñarse en unas políticas que son inviables, porque el país necesita el apoyo financiero y el anclaje político de la UE. Pero lo peor que ha hecho Tsipras es traspasar su propia responsabilidad como gobernante a los ciudadanos griegos. Se elige a los dirigentes para que resuelvan los problemas y no para que los agraven. Aún hay un pequeño margen para volver a la negociación y buscar una solución, pero pasa porque Tsipras tome conciencia del abismo al que se enfrenta.
El problema es Tsipras, no Bruselas (ABC): La irresponsabilidad del Gobierno Tsipras es la causa por la que Grecia tiene un "corralito" bancario. El país ha llegado a él por la demagogia del populismo izquierdista que representa Syriza. Hay que recordar que cuando llegaron al poder, Grecia, después de un Ejecutivo conservador, empezaba a salir de la recesión. El problema de Grecia, hoy, no es Angela Merkel, ni la troika, ni Bruselas, gracias a los cuales la economía griega sobrevive actualmente. El experimento de la extrema izquierda en Grecia es todo un aviso para los demás países europeos en los que han aparecido partidos similares a Syriza. Los palmeros españoles de Tsipras representan para España un horizonte tan oscuro como Syriza para Grecia.
Suicidio a la griega (LA VANGUARDIA):La severa crisis en Grecia y en el sistema monetario de la eurozona se proyecta sobre la UE y, especialmente, en los países del sur, incluida España. El fracaso de las negociaciones y la convocatoria de la consulta encendieron todas las alarmas. Pasada la sorpresa por tan arriesgada decisión de Tsipras y tras las manifestaciones de malestar de varios dirigentes europeos, se intenta volver a la calma para instar a los griegos a que vuelvan a sentarse a la mesa de negociaciones. La posibilidad de que Grecia desista de realizar el referéndum es, hoy por hoy, nula. Así lo hizo saber ayer Atenas. La convocatoria ha dividido a los griegos, y el resultado es altamente incierto aunque trascendental. En el fondo de esta profunda crisis europea está el choque entre dos legitimidades. La de los países acreedores, que reclaman su derecho a cobrar la deuda, y la de los griegos, que enarbolan su derecho democrático al suicidio. Pero una cosa está clara: la unidad monetaria precisa la unidad política, que solo llegará cuando todos los países hayan efectuado las reformas que la hagan posible.
Grecia solo es solvente y viable dentro del euro (CINCO DÍAS): La decisión de Tsipras de rechazar de plano una aceptable propuesta de sus socios europeos y convocar un referéndum es un acto negligente e irresponsable. Los Gobiernos están para gobernar, no para dejar responsabilidades de Estado a los administrados. El BCE y el resto de las instituciones europeas deben parar el golpe de los mercados bursátiles, de deuda y de divisas, que vivirán envueltos en la volatilidad hasta que la sensatez de los griegos acepte las propuestas de Bruselas. Los riesgos de contagio no son menores. Una parte del este de Europa no integrada en el euro tiene relaciones intensas con la banca griega, y países como Chipre, Portugal y España pueden sentir las sacudidas del mercado contra sus bonos y sus compañías cotizadas. La crisis griega siempre tuvo un elevado componente especulativo para los enemigos del euro y fue utilizada como blanco de todos los ataques por ser la parte más débil del tablero.
Tsipras pone a Grecia al límite (EL ECONOMISTA):El desencadenamiento tan extremo de la crisis griega es inaudito cuando, a finales de la semana pasada, las posturas estaban más cerca que nunca. Pero la prioridad de Tsipras, lo que realmente quiere el primer ministro es arrancar a sus acreedores lo que éstos dejaron fuera de las negociaciones: una reestructuración de la deuda y, para ello, ha decidido llevar hasta el extremo su órdago, tomando como rehenes a la economía de su país, ya en recesión, y sobre todo a su población. Ha colocado al país contra las cuerdas, al allanar el terreno para un impago soberano sin abandonar la Unión Monetaria. Se trata de un escenario de plena incertidumbre sobre sus resultados, que demuestra que el Gobierno se encuentra a la deriva, y que Tsipras se aferra a una estrategia suicida para doblegar a sus acreedores. En el probable caso de que esta táctica fracase, tendrá como primera víctima a Tsipras y su Ejecutivo.
