Todo ocurrió cuando le llegó el turno de palabra a Gallardón. Las tres feministas, dos francesas y la líder española, Lara Alcázar, estallaron en gritos desde la tribuna de invitados. Las fuerzas del orden del interior del Congreso, después de algunos minutos intentado atraparlas, las arrestaron y las pusieron a disposición judicial.
Alcázar fue liberada a las pocas horas a condición de acudiese a prestar declaración ante el juez. Las otras dos fueron dirigidas a los juzgados de Plaza Castilla al no poder indicar un domicilio en España, hasta als 20 horas, cuando fueron lideradas.
Aparecer con los pechos al aire es el modus operandi de las activistas de femen. Explican que utilizan su cuerpo como un arma, como un instrumento para incomodar a políticos, religisoso y otras autoridades que, en su opinión, no respetan los derechos intrínsecos de la mujer.
Lara Alcázar aseguró que las protestas de estas activistas van a continuar. "Por supuesto, vamos a llegar más lejos y por supuesto vamos a seguir protestando", ha sentenciado. "Nuestra intención ahora es abrir un centro de Femen en Madrid para que las activistas se formen y estas protestas se sigan desarrollándose", ha dicho, al tiempo que ha explicado que su centro de referencia está ahora en París y que, por el momento, son entre 15 o 20 activistas en España.
Tras asegurar que han sido tratadas con "bastante brutalidad" tras la protestas y que les han quedado marcas, la activista ha explicado el lema de su protesta ´el aborto es sagrado´: "Si para Gallardón es sagrado el catolicismo y es sagrada su moral, para nosotros lo que es sagrado es la vida y la decisión de una mujer sobre su propio cuerpo".
Finalmente, a quienes consideran respulsivo este modo de protestar, la activista a respondido que lo que es "respulsivo" es que "no se tenga en cuenta la opción de las mujeres a decidir sobre sus cuerpos, sobre sus vidas". "No vamos a doblegarnos ante la opinión de un partido fascista, derechista y misógino", ha dicho en referencia al PP, al tiempo que ha asegurado que no quieren desacreditar ningún otro tipo de protesta feminista y que el suyo es solamente uno más.
El Mundo: El Feminísmo que prohibirían las feministas
El pleno del Congreso fue escenario ayer de la irrupción en España de Femen, movimiento que "buscaba un estreno con gran impacto mediático en España y que lo ha conseguido, pero no por la fuerza de sus ideas, ni por lo justo de sus reivindicaciones, sino porque enseñan sus pechos".
Y ahí la gran contradicción: con el pretexto de denunciar el ´sexismo´ y la utilización del cuerpo femenino son ellas las que enseñan el suyo para buscar la foto que "alimenta el morbo que dicen combatir". Esta forma de protesta choca con los postulados tradicionales de los movimientos feministas. "Para evitar que la Cámara acabe convertida en un circo, sería necesario reforzar las medidas de seguridad".