El terreno que ocupan las pozas de Cuatrociénagas, un valle montañoso situado en el norteño estado de Coahuila, se abrió por primera vez al mar hace 200 millones de años y se cerró hace 90 debido a movimientos geológicos, indicaron los científicos.
Desde entonces las especies que habitaban la zona han continuado existiendo en las mismas condiciones ambientales, sin sufrir alteraciones en su entorno acuático, explicó a Efe la responsable del instituto de Ecología de la UNAM, Valeria Sousa.
Estos seres han resistido sin ser desplazados por las especies contemporáneas gracias a que el ecosistema que habitan son las aguas continentales con menos fósforo que se conocen en
En total, en las aguas de Cuatrociénagas se han detectado desde que comenzaron las pesquisas 17.000 especies de virus de aguas marinas, todas nuevas para la ciencia, y otros seres como bacterias, crustáceos, peces y diatomeas.
Sousa comparo esta zona del desierto mexicano con las islas Galápagos, pues al igual que en éstas sus criaturas se han mantenido al margen de la evolución que afectó al resto de seres.
Este hallazgo es fruto de siete años de investigaciones sobre el terreno en las que han participado investigadores de la UNAM, diversas universidades de Estados Unidos y México y, hasta 2003, personal de
Fuente: Terra Actualidad