Agapito Maestre ha sido despedido fulminantemente y en plena Semana Santa. El pasado Martes Santo, recibió una llamada de la Universidad de Almería para que recogiera una carta en la que se le cesa como catedrático, a pesar de haber trabajado como tal desde 1996. Su despido no ha sido por falta de currículum ni como consecuencia de ningún tipo de expediente. Simplemente defendió la LOU, criticó algunas conductas del Rectorado de Almería y se posicionó en contra de la «utilización perversa» que de la institución han hecho algunos rectores, según el afectado.
Además, Maestre se declara víctima de un proceso judicial desencadenado por la torpeza o mala intencionalidad de la Universidad a la hora de convocar su plaza. El centro alega que el despido se debe a la necesidad de ejecutar una sentencia por irregularidades en la concesión de la plaza. El profesor ve clara la persecución «política e intelectual» desatada en su contra. Tanto reconocidos juristas como el propio Ministerio de Educación se han opuesto al despido.