Se trata, según la FJI-Precarios, de denunciar el "desafortunado giro" de la política científica del Gobierno, que "amenaza con echar por tierra y malgastar de la peor manera posible todo el esfuerzo económico y humano realizado hasta el momento".
Los presupuestos iniciaron su recorrido parlamentario "sin haber experimentado cambios significativos", después del "baile de cifras de estos últimos meses y a pesar de las protestas, manifiestos e iniciativas puestas en marcha por la comunidad investigadora", ha señalado.
La aprobación del recorte, según esta federación, supondrá una "inaceptable pérdida de puestos de trabajo en los centros más afectados" como el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), el Instituto Geológico y Minero de España (IGME) y el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT).
Además, contribuirá a la "precarización todavía mayor de la situación del eslabón más débil de la cadena, los jóvenes investigadores", que han visto "anuladas o retrasadas" por parte de los respectivos ministerios y las comunidades autónomas las convocatorias destinadas a financiar su actividad.
A juicio de FJI-Precarios, lo que está en juego es el futuro del país y el cambio del modelo económico, pues -a diferencia de otros países vecinos- en España se va a producir un "importante" recorte, "que contradice las declaraciones de nuestros gobernantes".
