Según informa el diario El País, otros 19 países han elegido grados de tres años y másteres de dos y otros seis (entre otros, Rusia, Lituania o Turquía) tienen sobre todo grados de cuatro años y másteres de dos; y en el resto no hay ninguna posibilidad que predomine sobre las demás, tal y como se recoge en el informe de la oficina europea de estadística educativa (Eurydice), sobre la implantación de Bolonia en el año en el que los países se habían comprometido a tener lista la reforma.
Sobre nuestro modelo , el mismo de EEUU, hay voces a favor y en contra. El hecho de que los grados tengan cuatro años es mayormente aplaudido, sin embargo donde surgen las críticas es en planificar la mayoría de los másteres con un año de duración, al no poder competir en igualdad de condiciones con los de los países que tengan dos años de duración.
Sin embargo, en lo que hay coincidencias es en que lo importante, al margen de la duración, es su calidad y que el profesorado se adapte a la nueva forma de enseñar.