Se trata de una asociación universitaria cristiana de San Francisco, a la que la Hastings College of Law de la universidad californiana le ha retirado el reconocimiento oficial por no admitir en sus filas a personas de orientación homosexual.
Ante esto, los jóvenes conservadores han optado por pedir al Supremo su derecho a negar a otros sus derechos, es decir, su derecho a discriminar a gays y lesbianas.
Su petición se debe a que, al no ser reconocidos como asociación oficialmente, no se les permite el uso de las instalaciones comunes ni a tener compensaciones económicas en sus encuentros nacionales.
Por su parte, la Universidad defiende su principio básico de no reconocer oficialmente ninguna asociación que discrimine a las personas en función de su raza, color, religión, origen, discapacidad, edad u orientación sexual.
Ahora, es el Tribunal Supremo el que tiene la resolución al conflicto.
Fuente: Dosmanzanas.com