El segundo grupo más numero es el del 11%, que empléan varias variables a lo largo de un mismo año. En tercer lugar, se sitúan el 5% de los acuerdos, que determinan varias variables para cada año.
En referencia al primer gran grupo, esa única variable puede ser o bien una constante, cuyo valor cambia en los distintos años de vigencia del convenio o bien un indicador (IPC, beneficios, ventas, entre otros) que alcanza valores específicos para cada periodo de vigencia y que son desconocidos en el momento de la firma del convenio.
¿Cuáles son los valores únicos más utilizados? El más común, el empleado en el 67% de esta clase de convenios, es la introducción de las tablas salariales. Así, la empresa y los representantes de los trabajadores pactan los sueldos de la plantilla sin posibilidad de que otro parámetro altere lo acordado.
El informe también hace referencia a los convenios donde ha habido congelación salarial o una reducción de las retribuciones en todos o en parte de los años de vigencia. Así, la variable única sigue siendo el Índice de Precios de Consumo (IPC), si bien en los últimos años se ha constatado cómo pierde protagonismo de forma acelerada.
El año pasado finalizó siendo el indicador único para el 15% de todos los convenios firmados, cuando en 2012 estaba presente todavía en el 19,3% de los mismos.
En ese caso, los que optaron por la inflación fueron el 17% en 2014 y nada menos que uno de cada cuatro (el 25%) en 2012. Es decir, que ahora el 85% de todos los nuevos convenios ya no tiene en cuenta la evolución de los precios a la hora de determinar el incremento salarial.
Por detrás de la inflación los indicadores únicos más empleados son el alza que fija el Presupuesto para el salario de los funcionarios, al que se acogen el 6% de los convenios y los resultados de la empresa, que son la referencia únicamente para el 3% de los acuerdos.
Fuente: Cinco Días