Abrieron la marcha tractores, caballos, carros tirados por bueyes, perros de trabajo y mascotas y aves de cetrería. Junto a los representantes de asociaciones y colectivos estaban presentes políticos de grupos con representación parlamentaria.
Un manifiesto leído a los manifestantes, para reivindicar la labor que realiza el sector primario o agrícola y ganadero, señala que este vive actualmente una situación límite, aunque a partir de ahora el mundo rural unido se defiende de estos ataques.
El secretario general de Alma Rural, Carlos Bueno, declaró que el principal objetivo es conseguir influir en las políticas agrícolas, ganaderas, sociales y ambientales, porque somos nosotros los que las sufrimos.
Los objetivos concretos de los convocantes son influir en las leyes, normativas y políticas agrarias, ganaderas, medioambientales o sociales, según Alma Rural desacertadas, para exigir que se adapten a la realidad del campo: Exigimos que se nos tenga en cuenta a la hora de legislar.
También resaltaron que el campo nunca falla, pues ni cuando se vivió ‘Filomena’, ni durante la pandemia, faltaron los alimentos en los supermercados gracias al esfuerzo y sacrificio del sector primario y del mundo rural. Asimismo, subrayaron su esfuerzo de control de enfermedades como la tuberculosis que existe en los animales silvestres para que no llegue a la ciudad.

El candidato de Ciudadanos a la Presidencia de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea, pidió que el sector primario controle todo el proceso, desde la producción hasta la distribución, durante su participación en la manifestación del mundo rural, que discurre este domingo por Madrid.
Por su parte, el vicepresidente primero de Acción Política de VOX y eurodiputado, Jorge Buxadé, criticó la política ecodestructiva del Gobierno de España y la agenda perversa 2030, desde la manifestación del mundo rural en Madrid, a su juicio por criminalizar a la agricultura y la ganadería y acabar con la rentabilidad de las explotaciones