jueves,18 agosto 2022
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Un IPC desbocado por la luz amenaza la negociación del SMI

La inflación frustra la promesa del Gobierno de trasladar la recuperación a los salarios

Redacción
La subida del IPC del 3,3% en agosto, adelantada este lunes por el INE, es la más alta registrada desde 2012 y una consecuencia directa de la escalada de los precios de la luz este año. Los precios ya suben casi el doble que los sueldos pactados en convenio.
Como ya contamos en Ibercampus, los hogares españoles sufren el doble que en Italia y otros países UE la subida de los precios de la luz, según el análisis del Banco de España, que sitúa nuestra exposición muy por encima de la de los vecinos europeos

La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), Teresa Ribera admitió ayer en el Congreso que el Gobierno poco puede hacer para frenar esta escalada y que la luz subirá hasta un 25% este año.

En su intervención, apoyó la creación en la Cámara Alta de una Comisión específica para estudiar las causas de la escalada de precios de la electricidad, e insistió en la vocación del Gobierno en diseñar un sistema eléctrico basado en las renovables a partir de una transición energética justa, al tiempo que arremetía contra la escasa empatía de las eléctricas. 

Pero sus únicas medidas concretas fueron el anuncio de una batería de ayudas para aliviar los efectos de la "pobreza energética" que se suman a las ya anunciadas, como el descenso del 7% del IVA de la factura.

El problema es que la situación va más allá de la situación de los hogares con menos recursos y cuestiona la economía doméstica de todos los ciudadanos. De hecho, frustra la gran promesa de inicio de curso político del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez: que la recuperación se traslade a los salarios

Luz Vs salarios  

Hasta que no se publiquen los datos de IPC definitivo no sabemos cuánto ha impactado en los precios de la energía en la subido los precios. Sí sabemos cuánto lo hicieron hasta julio, cuando el IPC alcanzó el 2,9%, y el componente de vivienda, agua y energía se disparó al 9,4%.

Este incremento de los precios contrasta con los registrados en los salarios pactados en convenios colectivos hasta julio, un 1,54%. En el caso de la electricidad, hablamos de una subida 6 veces superior.

Esta evolución contrasta con la registrada en 2020, cuando los precios de la energía caían y los salarios subían. En 2021, esta tendencia se ha invertido, y los precios suben más de lo que hacen los salarios, que han moderado las tendencias del ejercicio anterior.

Hay que recordar que muchos convenios tienen una cláusula de revisión salarial por IPC que compensan esta desviación. Pero sigue la del IPC general, no la de la luz que es uno de los elementos que más castiga este año la economía de los hogares.

 

Pensiones y SMI

A esta situación se suma el impacto del IPC en una subida de las pensiones, que han vuelto a vincularse al IPC, si se cumple la la previsión de organismos como el Consejo General de Economistas, que augura una subida histórica de la inflación del 3% a cierre de año.  . 

Ante esta situación, lo que también se le complica al Gobierno es la negociación del SMI. Aunque el Ejecutivo no ha puesto cifras, su idea es que el Salario Mínimo Interprofesional suba entre 12 y 19 euros este año, es decir, entre 2% y 1,3%. Menos de lo que sube el IPC.

El Gobierno se reúne con los interlocutores sociales mañana para analizar esta cuestión, ante la que, previsiblemente, la inflación disparada alejará aún más las posiciones de patronal y sindicatos.   

 

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